Melbourne, Australia. — Un incidente de seguridad conmocionó a Australia este martes, cuando un hombre que había lanzado amenazas contra el primer ministro Tony Abbott murió tras enfrentarse con la policía en la ciudad de Melbourne. Según informaron medios locales, el individuo atacó con un cuchillo a dos agentes antes de ser abatido por disparos de otros uniformados.

El ataque y la respuesta policial

De acuerdo con la cadena pública ABC, el hombre estaba bajo vigilancia oficial por sospechas de terrorismo. Durante la intervención, habría intentado herir con un arma blanca a los agentes que lo seguían, causando lesiones graves a dos de ellos. Ambos policías fueron trasladados de inmediato a un hospital cercano, donde uno de ellos permanece en condición crítica, aunque estable, mientras que su compañero recibe atención médica y evoluciona de manera positiva.

La policía estatal de Victoria informó que la actuación de los uniformados se dio en defensa propia, luego de que el sospechoso desoyera las órdenes de rendirse y continuara con la agresión. El individuo falleció en el lugar de los hechos.

Antecedentes y contexto

El atacante había sido identificado previamente por los servicios de seguridad australianos debido a sus amenazas contra Abbott y sus posibles vínculos con actividades extremistas. Aunque las autoridades no han revelado su identidad, se confirmó que estaba bajo investigación por cargos de terrorismo y era considerado un riesgo potencial para la seguridad nacional.

Este hecho ocurre en medio de una creciente preocupación en Australia por la radicalización de individuos vinculados a ideologías violentas. En los últimos años, el país ha endurecido sus leyes antiterroristas y reforzado la cooperación entre agencias de inteligencia y policía para prevenir ataques de este tipo.

Reacciones oficiales

Las autoridades de Melbourne hicieron un llamado a la calma y aseguraron que la situación se encuentra bajo control. “Nuestros agentes actuaron en defensa propia frente a una amenaza directa. No hay indicios de que exista un peligro inmediato para la población”, señaló un portavoz de la policía de Victoria.

El primer ministro Abbott, por su parte, condenó el ataque y expresó su apoyo a los agentes heridos: “La violencia contra quienes velan por nuestra seguridad nunca será tolerada. Mis pensamientos están con los oficiales y sus familias”.

Lo que sigue

La investigación está en curso para esclarecer los detalles del caso, incluyendo los posibles vínculos del atacante con organizaciones extremistas. La fiscalía y los servicios de inteligencia australianos colaboran en la recopilación de pruebas para determinar el alcance de las amenazas previas y establecer si existían cómplices.

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